Cuando me cuesta perdonar.

Señor todopoderoso, quiero poner en tu presencia

a esa persona que me cuesta amar.

Señor mío, guardo en mi corazón

Un rencor que me perturba.

No puedo aceptar a esa persona que me falló,

Me rechazo y me dañó.

Pero yo sé que esta falta de perdón,

Me hace mal, me enferma,  me quita la alegría,

Y la paz interior. No vale la pena.

Tú me amas, Señor, pero también, quieres que ame

a los demás con ese amor que perdona,  que

comprende y espera.

Tú quieres que me libere de esas espinas escondidas

 de resentimientos.

Pero no puedo, Señor, en el fondo no quiero liberarme

De este rencor oculto, porque es como una manera tonta

de cobrarme lo que me hicieron.

Por eso, Señor dame la gracia de querer verdaderamente

Perdonar, de querer arrancar de mi alma todo rencor y

deseo de venganza.

Dame el deseo de liberar a esa persona, para que no le exija

pagar por lo que me hizo, para que pueda recordarla otra vez

con paz y sin angustia.

¡Hazme libre, Señor!

En este momento quiero decirte que comprendo las debilidades

de esa persona. Quiero pensar que no actuó  por malicia o

por odio, son por su debilidad, por sus angustias, por sus

problemas que perturban su interior.

Es criatura débil, pero tú la amas con infinito amor,

Porque ere su Creador y su Padre. Tú comprendes su debilidad,

como comprendes la mía. Por eso la abrazo con el corazón, la

perdono, y le deseo toda clase de bienes y de felicidad.

Señor amado, con el poder de tu gracia coloca un poco de tu

Infinito amor en mi corazón, porque quisiera perdonar a la

Que más me ha ofendido.

A esa persona que por su debilidad humana me hizo mal,

me despreció, me usó, o me traicionó.

Quisiera mirar a esa persona con tu amor y entender

su profunda debilidad,  y el dolor de su corazón, todo

lo que sufrió en su vida en la vida, y todo lo que la llevó

a ser cruel conmigo o a ignorarme.

El único amor divino es el tuyo, y tengo todo el amor

porque nunca te vas de mi lado.

Dame tu gracia divina para comprender

Y perdonar a esa persona. Hoy la libero

por completo de tener que pagar

por lo que me hizo.

Renuncio al rencor que enferma mi corazón.

Me libero de este rencor y libero a esa

persona de toda atadura conmigo.

Dame la gracia de orar por ella para

Ver algún día que tú la has

transformado y sanado su corazón

herido, para que podamos estar juntos

y felices y totalmente reconciliados en

el cielo. Amén.

Victor Manuel Fernandez 

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SI TIENES UN HIJO VARÓN

Si tienes un hijo varón, ve tejiendole unas alas con hilos rojos de admiración, cosidas con agujas de dignidad y plumas de ángeles en libertad y en su mochila, el día que parta, coloca el latido de tu corazón, y varitas de hogar para comenzar su propio nido.

para que encuentre el amor de una mujer y lo dignifique con tu ejemplo.

Porque los hijos varones, no siempre regresan, se les ha sido dada la semilla y han de cuidar que crezca sana, por eso si tienes un hijo varón, dale principios, sentido de responsabilidad y aprecio por su nombre, porque son los varones los que resguardan el corazón de las mujeres y quienes no deben perder nunca su admiración.

Si tienes un hijo varón, sabrás que hay que amarlos en la misma medida que los vas soltando, sabrás lo que duele y lo mucho que te enseñan, si tienes un hijo varón has tenido la gran oportunidad de enseñarle de primera mano el motivo de la confianza de las mujeres, la fortaleza que les aportan y el inmenso amor que les inspiran.

Si tienes un hijo varón, sabrás que a ellos se les ama en la misma medida que se les empuja a volar, con orgullo y con confianza, con aprecio y admiración por su temperamento y con la satisfacción que provoca su apuesta por el futuro, porque los hijos varones se guian por la fuerza del espíritu y amarán fuertemente en libertad, como tú encontraste el tuyo.

Cerca o lejos, si tienes un hijo varón, has ayudado a construir el mundo que necesitamos todas las mujeres, de respeto, de esperanza, de valor y de dignidad de género.

L.T. Noriega

Ilustración. Pascal Campion.